No es lo mismo un ‘brunch‘, que un almuerzo contundente, ni un tapeo nocturno que un ‘tardeo’ o una cena en toda regla. Y por eso cada tipo de momento ‘gastro’ aconseja un vino diferente. Como en las fechas que estamos -y que nos quedan- solemos tener una intensa ‘vida social’ -y casi todas tienen comida de por medio- os damos algunas ideas por aquí.
Elegir los vinos que vamos a tomar en la cena de empresa o con amigos, en ese tardeo que empieza en los establecimientos de nuestra ciudad y termina en la casa de alguien… no tiene por qué ser un mar de dudas ni representar un gasto desorbitado. En Campoameno, de hecho, tenemos vinos excelentes con una relación calidad-precio más que evidente. Tu elección te va a ayudar a acertar en estas fiestas con vinos ideales para brindar, disfrutar y, cómo no,, no arruinarse esta Navidad.
De manera resumida, podríamos decir que, para acertar con los vinos de esta Navidad, lo ideal es maridar blancos frescos (como un verdejo) con entrantes y pescados, tintos con cuerpo (Merlot, Cabernet Sauvignon) con carnes asadas y rosados para aves y ensaladas. Sin olvidar, por supuesto, los vinos espumosos (como un brut nature) para brindar y dulces (como nuestro Frizz o un moscatel La Mona) con postres, buscando siempre equilibrio con el sabor del plato.
Teniendo en cuenta que tenemos considerar las preferencias de nuestros acompañantes, optar por una variedad de vinos, desde espumosos para el aperitivo hasta tintos con cuerpo para los asados, garantizará que cubramos todos los gustos y momentos de celebración.
para aperitivos o entrantes

Mariscos, quesos, embutidos, encurtidos, canapés… propios de brunch o de tardeo, van bien con vinos blancos frescos y ligeros, ya que son muy adecuados para potenciar el sabor de mariscos y pescados ligeros. Nuestra propuesta: el Campoameno Verdejo o Cal y Canto Blanco. Son vinos económicos y bastante interesantes para esos momentos gastronómicos más ligeros.
Un Sauvignon Blanc Mar y Luna o un vino espumoso también resultan excelentes para abrir el apetito y como opción versátil para diversos aperitivos.
para platos principales o almuerzos contundentes

Por supuesto, si hablamos de platos principales la cosa cambia. Lo mismo que el maridaje dependerá del ingrediente estrella del plato en cuestión.
- Para pavo, pollo o carnes blancas, al ser más delicadas, será más aconsejable optar por vinos blancos con cuerpo o tintos ligeros, que maridan mejor con este tipo de carnes. Por otro lado, muy habituales en los menús de Navidad, fuera y dentro de casa. Nuestra propuesta: un Chardonnay con o sin barrica (como El Pulpo) o un Merlot con sus notas afrutadas y textura sedosa (como el Cal y Canto).
- Para asados -como o cordero- y carnes rojas, necesitamos vinos tintos estructurados y con cuerpo. Nuestra propuesta: un varietal de Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Syrah como el Marques de Campoameno, o un Rioja 5 Oros Reserva.
- Para pescados grasos (como salmón o atún), un vino blanco fermentado y con crianza en barrica, complejo y vibrante, es una excelente opción. Nuestra propuesta: el Finca La Melendra Blanco.
para postres, dulces y demás golosinas

Sin duda los dulces de todo tipo tienen bastante presencia en Navidad. Y, a los postres finales propios de cualquier menú, se unen momentos dulces en los que chocolates, roscos y todo tipo de golosinas aparecen en escena y necesitan un buen acompañante en copa.
Nuestras propuestas:
- Vinos espumosos (como un brut nature) para brindar, pero también para postres de todo tipo.
- Y vinos más dulces y suaves (como nuestro Frizz o un moscatel La Mona) para todo tipo de dulces y momentos ‘azucarados’ 😉.
Y recuerda: si no estás seguro, una selección variada es la mejor apuesta.
¡¡¡SALUD!!!
Busca similitudes (un vino afrutado con un plato dulce) o contrastes (un vino más ácido con comida grasa) para realzar la experiencia.